Introducción


Los siniestros viales siguen estando dentro de los servicios que más realizan los operativos de bomberos diariamente, por encima de ellos se encuentran los servicios de asistencias técnicas.

“En Europa según la Carta Europea de la Seguridad Vial. “cada año se contabilizan 40.000 muertos a causa de los accidentes de tráfico y 1.700.000 heridos con un coste total de 160 mil millones de Euros”. Dentro de la campaña celebrada en Febrero de 2022 nos indica que “Pese a que el 68% del parque de vehículos de nuestro país son turismos, el transporte de mercancías tiene un peso importante en lo que a seguridad vial se refiere ya que representa el segundo tipo de vehículo más numeroso que circula por nuestras carreteras.

En Estados Unidos diariamente circulan más de 400.000 autobuses de escolares. 

En caso de accidente en cualquiera de los vehículos descritos ocasionará daños más severos debido a las masas y dimensiones de los mismos.

Con estos datos reflejados los servicios de bomberos en la actualidad deben de prepararse ante los avances tecnológicos. Avances, que incluyen nuevas herramientas y estructuras de diferentes materiales en la fabricación de los vehículos o la presencia cada vez mayor de los sistemas de propulsión alternativos. Los servicios de bomberos gracias a la existencia de una continua mejora en la tecnología tienen a su disposición multitud de dispositivos y herramientas de última generación logrando que sean más ligeras, más potentes y más seguras.

Los servicios de bomberos también integran formación específica interna o externa sobre rescate en vehículos que les sirve para mejorar las habilidades duras e implantar los procedimientos operativos más adecuados a cada servicio. Ambas herramientas en conjunto son importantes a la hora de tener éxito en las operaciones de rescate en vehículos.

Por esto debemos los servicios de bomberos, prestar más atención a los vehículos pesados de tal forma que tengamos los procedimientos más interiorizados y asimilados.

Características de los vehículos pesados


Año tras año, gracias a la estrecha colaboración entre los servicios de rescate y la parte empresarial de la automoción, específicamente los departamentos de construcción y seguridad en vehículos, hace que las casas comerciales pongan a disposición de los equipos de rescate la información concreta sobre sus vehículos y sus sistemas de seguridad consiguiendo así implementar los procedimientos tácticos, los niveles de eficiencia y seguridad de las intervenciones cuyo objetivo prioritario es salvar vidas.

Cuando hablamos de vehículos pesados, concretamente camiones estamos hablando de vehículos de grandes dimensiones, altos y de elevados pesos, con estructuras que pueden tener bastidores reforzados con travesaños de acero de gran resistencia sobre la que se alojan tanto la cabina o el semi remolque. Las cabinas suelen construirse mediante chasis autoportante de acero que constituye un habitáculo de seguridad, aunque hoy en día la tecnología permite construir células seguras en aluminio y plástico. Además, en vehículos modernos, la cabina cuenta con sistemas de airbag, cinturones con pretensores, asiento del conductor neumático regulable, volante regulable y en algunos existen un espacio trasero para litera y otra serie de servicios para hacer viajes de grandes rutas y que sean más confortables.

Estos vehículos cuentan con un sistema neumático de suspensión que permite bajar y subir tanto la cabina como el semirremolque, siendo muy útil conocer su funcionamiento para mejorar las condiciones de trabajo en el rescate, sobre todo la altura.

Hoy en día se están integrando al mercado camiones eléctricos, aunque para pequeños trayectos ya que poseen bajas autonomías, así como vehículos con pila de hidrógeno, que suponen un nuevo riesgo a evaluar y neutralizar en caso de un accidente de tráfico.

El sistema eléctrico de los camiones convencionales está compuesto por dos baterías de gran capacidad de 12 V conectadas en serie generando un voltaje de servicio de 24 V (aunque algunos elementos del vehículo funcionan a 12V).  A la hora de realizar la intervención debemos de tener en cuenta que, si desactivamos los sistemas eléctricos, no podremos maniobrar los mismos ni el sistema neumático del vehículo. 

Al igual que si paramos el motor de combustión interna por alguno de los procedimientos conocidos, este no garantiza la ausencia de tensión, como es lógico tanto en vehículos convencionales como en los de nueva tecnología. 

Debemos de tener especial precaución con la desconexión eléctrica, ya que esta puede provocar el descenso del asiento neumático del conductor y puede provocar lesiones adicionales. Esta maniobra en caso de realizarla debe estar coordinada por el mando y el responsable médico.

Clasificación de los rescates en vehículos


 Los rescates en vehículos se pueden clasificar según el país o la norma que lo regule.

En Estados Unidos los rescates en vehículos están regulados por la  “National Fire Protection  Association” (NFPA) 1006. Estándar para las calificaciones profesionales del personal técnico.

Dicha norma clasifica los rescates en vehículos en su edición 2021 en dos disciplinas: Capitulo 8 «rescate en vehículos comunes de pasajeros» y Capitulo 9 «rescate en vehículos pesados»

cada una de las disciplinas las divide en 3 niveles:

  • Rescate en vehículos Nivel advertencia
  • Rescate en vehículos Nivel operaciones 
  • Rescate en vehículos Nivel técnico

Este es uno de los cambios importantes entre las ediciones del 2017 y 2021; la separación en su capitulo 9 de la disciplina «Rescate para vehículos pesados.

En España no existe una norma que regule el rescate en vehículos pero se podría clasificar por el tipo de vehículo según Directiva o Real decreto como norma general en:

  •  Vehículos ligeros (categoría M1, N1) 
  •  Vehículos pesados (categorías M2, M3, N2, N3, O3, O4, T)

Dentro de estas clasificaciones se pueden diferenciar los vehículos pesados:

  • Con o sin sistema de remolque
  • Cabina y remolque
  • Camiones especiales: de residuos orgánicos, criogénicos, frigoríficos, grúas 
  • Cisternas 
  • Entre otros 

Como podemos observar y como ocurre en otras disciplinas que acometen los servicios de bomberos, existen diferentes niveles de preparación y competencias a la hora de intervenir en un servicio. 

Las competencias y la formación de los integrantes de los servicios de bomberos deben ser diferentes según el servicio que se vaya a realizar.

Por ejemplo para poder intervenir en un incendio estructural en vivienda o en cambio en un incendio estructural de un buque  ambos intervinientes deben cumplir con  unas competencias mínimas para realizar la intervención con eficacia y seguridad,  pero  presentarán  niveles diferentes de preparación, el margen de error y preparación de  los integrantes  en una debe ser superior que la otra debido al diferente tipo de  envolvente, peligros, medios humanos y materiales necesarios  y a las diferencias en la realización de las  técnicas y tácticas empleadas en cada caso.

En los rescates de vehículos las habilidades y los procedimientos empleados serán también diferentes en los  servicios de rescate nivel operaciones (ligero) a los servicios nivel técnico (pesados). Sin lugar a dudas las competencias que se necesitan en los rescates de vehículos pesados serán mayores, incluso las principales acciones prioritarias (procedimiento) pueden ser diferentes en un nivel frente al otro. 

Diferencias de las prioridades en rescates de Vehículos comunes de pasajeros VS vehículos pesados.

En los rescates de vehículos ligeros o pesados el principal protagonista es siempre el afectado, pero hay diferencias a la hora de abordar el procedimiento.

  • Estabilización: En los rescates de vehículos ligeros la estabilización puede presentar algún margen de error de cálculo, lo que se busca especialmente es que el vehículo no presente movimientos que afecte a la víctima sobre todo a la hora de abordar los intervinientes al interior del vehículo o en su extracción.

 En cambio en la estabilización de los rescates de vehículos pesados, lo que se desea es que la carga no presente ningún movimiento que ponga en peligro a todos los intervinientes  y no debe existir ningún margen de error al respecto, ya que las consecuencias pueden ser muy graves.

  • Planes de excarcelación: En los rescates de vehículos ligeros el mando debe realizar un plan rápido y una vez conseguido, debe plantearse en función de cómo de estable se encuentre el afectado si realiza un plan seguro o termina de acometer ese plan rápido ya preparado.

En los rescates de vehículos pesados se debe fusionar ambos planes si fuera posible. Se debe de realizar un plan seguro y que sea lo más rápido posible. Debido a que ya bastante se tarda en realizar una estabilización con seguridad en esta clase de servicios. El mando debe jugar entre realizar el menor espacio posible y que sea lo suficientemente seguro para abordar la intervención con éxito. Es lo que se conoce como un 2×1 plan rápido y seguro fusionado. 

Rescate en vehículos pesados


Podemos clasificar de forma general el rescate en vehículos pesados en dos grupos, pudiendo ser las técnicas y tácticas empleadas diferentes en cada caso.

En dicha clasificación no se incluyen los siniestros en donde estén involucradas las mercancías peligrosas (MATPEL). En ese caso se debe fusionar los dos procedimientos operativos estandarizados existentes en los servicios (el de rescate en vehículos y el de mercancías peligrosas) para realizar esta clase de servicios.  

Dicha clasificación la podemos encontrar así:

Vehículos de transporte de pasajeros.

  • Presenta una complejidad debido al gran número de personas en el interior pudiéndose convertir en un Incidente de Múltiples Víctimas (IMV)

Vehículos con carga y/o maquinaria pesada 

  • Debido al contenido de la carga presenta una problema en la estabilización y se requiere gran cantidad de material.

Esa complejidad que existe en la estabilización en los rescates de vehículos pesados con carga hace que los rescates en esta clase de servicios exijan un máximo nivel en el dominio de las técnicas y tácticas a emplear. Para poder realizar el rescate y dar garantías de seguridad a los afectados y a los intervinientes, en los rescates de vehículos pesados con carga debemos de realizar una estabilización que no presente margen de error. 

“Una buena estabilización de la escena nos dará la llave para tener éxito en las intervenciones de rescate con vehículos pesados”.

Las fases de la actuación para realizar una estabilización de nivel técnico en rescate en vehículos pesados con carga son:

  • Identificación de la carga 

Se realizará de forma visual desde el exterior a una distancia que presente un margen de seguridad apropiado a la escena  

Se tendrá que evaluar la carga en función de:

Carga en estado líquido: pueden presentar un serio peligro. Cualquier movimiento indeseado puede hacer que la intervención fracase. Se trata de uno de los estados de la carga en donde el nivel de la estabilización debe ser excelente.

Carga en estado sólido: en principio no presenta el problema de la carga en estado líquido, pero hay que tener en cuenta que tipo de carga sólida es, a la hora de estabilizar el vehículo debemos de tener en cuenta cómo actuará la carga interior.

No será lo mismo estabilizar un camión con cajas de cartones que estabilizar un camión con botellas de vidrio sueltas en el interior. La segunda es menos previsible y presenta una dificultad añadida.

Carga en estado sólido dinámica: se trata de cargas que pueden presentar un movimiento indeseado debido a la naturaleza de la carga a moverse cuando quiera. Como ejemplo de cargas dinámicas tendríamos camiones con animales en el interior. Se trata de tener en cuenta y valorar si es mejor estabilizar el camión con la carga o sacar primero la carga y luego estabilizar. 

Ambas situaciones deben ser evaluadas por el mando que tendrá en cuenta, ante todo: al afectado y al movimiento o posición que adoptará el camión una vez la carga esté fuera.

Carga en estado gaseoso: se trata de la carga que presenta el menor grado de dificultad a la hora de la estabilización, como norma general se comportará como una carga sólida y solidaria en todo el conjunto. Habrá que distinguir entre carga gaseosa total o gases licuados. En el segundo caso se comportará como un líquido.

  • Evaluación de los peligros y seguridad en la escena 

Se debe hacer una evaluación de la escena y eliminar los riesgos o mitigarlos antes de empezar la estabilización. Se debe tener especial atención a:

  1. Riesgos eléctricos.
  2. Bloqueo de frenos, parada del motor, sistema neumático, sistema eléctricos.
  3. Determinar la cantidad de carga que tiene el vehículo, se trata de un dato muy importante para poder saber si nuestros equipos o nuestra técnica empleada dará resultados o no.
  4. Derrames existentes y valoración de utilización de espuma para dejar la zona de intervención segura, entre otros.
  • Estabilización 

Como hemos puntualizado anteriormente “La estabilización es la clave para el éxito en una intervención de rescate con vehículos pesados”. Para realizar una estabilización segura en esta clase de intervenciones se debe de tener pleno dominio en la técnicas y tácticas empleadas y de igual modo dominar las habilidades duras y blandas que en conjunto harán que la intervención se realice adecuadamente.  

Las habilidades blandas que se deben de dominar por parte de todo el equipo interviniente son:

  • Gestión del tiempo. En el rescate de vehículos pesados “las cosas llevan su tiempo, el ir despacio es más seguro y más rápido al final”. Pero no debemos de olvidar que el tiempo es primordial para que el afectado pueda salir y ser atendido adecuadamente.
  • Paciencia. Se trata de servicios largos y a veces desesperantes.
  • Limpieza de la escena. La escena debe estar limpia una y otra vez, debido a la existencia de mucho material presente debido a la propia carga del camión o al material utilizado por los intervinientes.
  • Creatividad. Si existe un servicio en donde los bomberos deben ser creativos es el rescate en vehículos pesados en uno de ellos. Se debe dominar los vectores de movimientos, pero a la vez hay que ser creativo debido a las dificultades que nos vamos a encontrar. 

La creatividad debe ser sinónimo de seguridad en todo momento.

Otras habilidades blandas importantes: 

  • Atención a los detalles
  • Liderazgo
  • Organización.

Las habilidades duras que se deben de dominar por parte de todo el equipo interviniente son:

  • Conocimiento completo y limitaciones de las herramientas y accesorios a utilizar. El personal interviniente debe conocer las limitaciones de los accesorios y herramientas que va utilizar, un cálculo mal sobre sus limitaciones o un uso inapropiado de las herramientas puede presentar graves lesiones a todo el personal. 
  • Completo dominio de los vectores existentes en movimientos de grandes cargas. En los rescates de vehículos pesados una estabilización a menudo es sinónimo de levantar o mover la carga. Por ello se debe dominar los vectores que existen en dichas intervenciones analizando una y otra vez qué hará la carga si hacemos una acción determinada.

Los vectores generales que se deben de dominar en movimientos de cargas son:

  • Movimientos longitudinales 
  • Movimientos transversales
  • Movimientos rotatorios 

Todos los vectores están conectados entre sí. Por eso se debe de entrenar las habilidades duras en situaciones casi reales para minimizar el riesgo de fracaso en una intervención real, donde las consecuencias pueden ser muy graves. 

Debemos de tener siempre presente el triángulo de la seguridad en los movimientos de cargas, en donde cada lado estará conectado con los demás. 

  • Carga que se quiere mover
  • Herramienta que se usará 
  •  Terreno en donde se encuentra apoyada la carga o la herramienta 

Podemos observar que una mala evaluación o un mal uso de la herramienta hace que afecte otro lado del triángulo de la seguridad en las acciones con movimientos de cargas. Por ello el personal que interviene en esta clase de servicios debe poseer unas competencias acordes con la situación que desea abordar. 

En el recuadro inferior podemos observar algunas consecuencias que pueden ocurrir en base a la acción que realicemos y las medidas que deberíamos de tomar para que no ocurriera. 

  • Posible consecuencia: Si falla el terreno podría fallar la herramienta o se podría mover la carga
  • Acciones a tener en cuenta: Aumentar la superficie entre herramienta y terreno

  • Posible consecuencia: Si falla la herramienta se podrá mover la carga 
  • Acciones a tener cuenta: Limitación de la herramienta (capacidades, longitudes, etc)

  • Posible consecuencia: Si se mueve la carga podrá fallar la herramienta 
  • Acciones a tener en cuenta: Evaluación de la carga y su disposición

  • Realizar estabilizaciones de seguridad adecuadamente antes de realizar el plan de excarcelación o extracción. Todo movimiento de estabilización que tenga incluido un desplazamiento de carga debe ser estabilizado como mínimo por dos puntos de seguridad.

Ejemplos:

Si subimos la carga con puntales estabilizadores con función de gatos elevadores se deberá de estabilizar paralelamente la carga por seguridad con un zampeado o cribbing.  Si falla los puntales estabilizadores el zampeado (entarimado) funcionará como una segunda seguridad.

Si hacemos un movimiento de carga con cojines neumáticos el zampeado (entarimado) acompañará a los cojines en su elevación paralelamente existiendo siempre dos puntos de seguridad (cojines y entarimado)

Para poder llevar a cabo los procesos que hemos analizado y realizar un rescate con vehículos pesados con garantías de éxito hay que tener en cuenta algunos factores:

  • Tener un equipamiento apropiado, conocer sus limitaciones y su uso correcto.
  • Mantener una capacitación adecuada y permanente. 
  • Conocer los avances tecnológicos de los vehículos que vayan apareciendo. 
  • Poder realizar entrenamientos en escenarios casi reales.
  • Llegar a ser Pro activo y no Reactivo. Adelantándose a lo que podrá ocurrir.
  • Entrenar estableciendo continuamente cambios de planes de actuación según las circunstancias que vayan apareciendo en la escena. 

Con ello mejoraremos la gestión del estrés y la conciencia situacional.

  • Conocer y controlar con entrenamientos los vectores a la hora de realizar movimientos de cargas.


ACERCA DE LOS  AUTORES :

Jorge L. Sañudo García

Sargento de Bomberos del Ayuntamiento de Almería

Máster de emergencias y protección civil (Universidad de Valencia)

Instructor técnico de bomberos (Universidad de Alcoy)

Formador de Formadores en Tráfico (Diputación de Málaga)

Instructor (Ayuntamiento de Almería)


 Iván Cabrera Sosa

Agente de bombero del Servicios de Extinción de Incendios y Salvamento de Las Palmas de Gran Canaria (2004)

Instructor Nivel I y II de NFPA 1041 certificado por Texas SFFMA (State Firefighters and Fire Marshals Association of Texas)

Instructor de Servicios Operativos de Emergencia (Universidad de Valencia)

Técnico Superior en Coordinación de Emergencias y Protección Civil (Ministerio de Educación y Formación Profesional)

 Instructor en FALCK SCI (España)

 Instructor del Equipo de rescate técnico en vehículos para FIRES Foundation (Houston E.E.U.U)